Buda explotó por verguenza.
Pude ver en la sala Verdi de Madrid ( en Sevilla se proyecta en Avenida)esta preciosa y dura película, Buda explotó por verguenza, de la jovencísima directora iraní Hana Mkhmalbaf.
La cara de esta niña (sí, esa hermosura del cartel) llena toda la pantalla, su mirada te escruta desde el otro lado, parece que es ella quien te observa cuando mira a cámara. Es una película sorprendente y dura, incluso diría que durísima si no fuera por la belleza del rostro de esta niña, Baktay. También por la mirada triste de su amigo Abbas y de otras niñas. La tensión viene de la mano de otros niños, y de sus crueles juegos en los que imitan las guerras de sus mayores; precisamente, que sean niños jugando a matar, es lo que convierte esa tensión en horror.
Sinopsis que nos ofrecen en Verdi: Bajo la estatua de Buda que destruyeron los talibanes, aun viven miles de familias. Baktay, una niña afgana de seis años, es incitada a ir a la escuela por el hijo de sus vecinos que lee los alfabetos frente a su cueva. De camino a la escuela, es acosada por unos niños que juegan de forma cruel reflejando la sociedad tan violenta que los envuelve. Los niños pretenden lapidar a Baktay o destruirla como el Buda, o dispararla como hicieron los americanos en el laberinto de las cuevas. ¿Será capaz Baktay de superar estos obstáculos para poder aprender los alfabetos de su lengua materna?
No os la perdáis.
0 comentarios